La tristeza de perder a un hijo
Gavin lloró por perder un vínculo familiar que ahora comprendía que era más complejo y profundo de lo que nunca había apreciado. Había sido hijo por elección y amor, no por sangre, un hecho que había ignorado trágicamente. Le dolía el corazón de arrepentimiento, añorando un vínculo que temía que se hubiera roto. Parecía que la mansión estaba vacía, un monumento a su conexión perdida.

El lamento de un hijo perdido
Lamentos reflexivos
En los silenciosos rincones de la noche, la mente de Gavin recordó los acontecimientos que habían conducido a aquel momento. Pensó en las decisiones que había tomado, las palabras que había pronunciado y las oportunidades que había desaprovechado para apreciar el amor de su padre. Su corazón se llenó de vergüenza, y cada recuerdo era un recordatorio de decisiones y palabras que no podían borrarse.

Arrepentimiento reflexivo