Los primeros años de Elin
El mundo de Elin no dejó de girar a causa del divorcio de sus padres. Creció curiosa y enérgica, sobre todo acerca de la próxima gran cosa. Le iba bien en la escuela e incluso demostraba buenas habilidades en el campo de fútbol. Aun así, a finales de los 90, Elin dejó atrás su exitosa vida para trasladarse a Berlín junto con su padre. Sin embargo, Elin volvió a Suecia unos años más tarde, y fue entonces cuando la descubrió un famoso fotógrafo.
Un trabajo de modelo de éxito
Elin trabajó con el fotógrafo Bingo Rimer y acabó convirtiéndose en un éxito. Desde entonces, varias empresas famosas se pusieron en contacto con ella e incluso apareció en una famosa revista sueca como modelo de trajes de baño. Sin embargo, Elin sentía que podía hacer algo más que modelar. Aspiraba a convertirse en psicóloga infantil y acabó dejando el modelaje para hacer varios trabajos secundarios con el fin de financiar sus estudios universitarios.