Una Realización Súbita
Mientras Marie estaba sentada en la silenciosa habitación, se dio cuenta de algo. Había un viejo y polvoriento desván en la casa familiar que su padre siempre había mantenido cerrado con llave. Hacía años que no pensaba en él, pero de repente le pareció la clave de todo, quizá literalmente. Su padre había sido el único que había entrado en el desván, diciendo siempre que sólo estaba lleno de trastos inútiles. Pero ahora no estaba tan segura. ¿Podría ser esta llave para aquella puerta olvidada?
El desván prohibido
Con renovada determinación, Marie se dirigió a la puerta del desván. Estaba cerrada desde que tenía memoria. Había preguntado por él cuando era más joven, pero su padre siempre le había dado largas, diciendo que allí arriba no había nada de interés. Ahora, de pie ante la puerta, con la llave en la mano, sintió un escalofrío. ¿Qué podría haber dentro que hubiera valido la pena mantener en secreto todos estos años? Introdujo la llave en la cerradura.